Hoy me gustaría daros dos opciones para cambiar vuestra imagen “capilar”, en primer lugar deciros que el pasado 17 mayo JOSE VALLE inauguró un nuevo Salón de Peluquería en Paseo de Sant Joan, 131-133 de Barcelona, contaros que como él mismo dice en su página web ha trabajado con los peluqueros mas alternativos y rompedores de Barcelona como son, Marcel, Fernando Torrent, Salva G y Polopelo. Y la verdad es que cuando buscas asesoramiento es más que recomendable, lo digo por propia experiencia, puede que os parezca un poco arriesgado si mirais su web pero la gente que lo ha visitado ha salido encantada, ya que dentro de tu propio estilo, te asesora en el tipo de corte y color que más te favorece.
Aquí os dejo con su página
Otra opción bastante más económica es el SALERM COSMETICS BCN ACADEMY & TECHNICAL CENTRE, situado en la calle Muntaner número 8 de Barcelona, se trata de una academia de peluquería que por poco sales hecha un sol. En el que en principio, no es necesario pedir hora. Os paso el teléfono de la pelu -93 323 08 54- y el enlace web de salerm
Espero que os guste la variedad de mis propuestas!
Me apunto a la segunda opción,por motivos de economía....
ResponderEliminarYo ya he probado la segunda opción y os la recomiendo. Pebbles
ResponderEliminarDespués de escuchar las aventuras y desventuras de mis compañeras de trabajo esta mañana, fui con bastante cautela a la academia Salerm, eso si con la lección bien aprendida.
ResponderEliminarLlegué a las 18 h, demasiado tarde para mi baño de color, ya que cierran a las 19h¡¡¡ohhhhh!!!!.
Pero fue entrar a la peluquería y allí estaba ÉL, ese profesor del que tanto me hablaron, me lo imaginaba dando piruetas a mi alrededor con tijeras en mano retocando mi hermosa melena….
Me dieron una toallita, y un chico muy amable me lavó el pelo, me masajeó la cabeza, y me lo secó con mucha suavidad. Casi me duermo durante el proceso de lavado, mmmmmm.
Cuando pasé a que me cortaran el pelo, vino la pregunta que siempre odio:
-¿Cómo lo quieres?
-Pues...quiero que me cortes las puntas, y que me escales el cabello….- contesté
Desde el espejo observaba al joven aprendiz cortar con cuidado y sigilo las puntas, a medida que veía su buena destreza con las tijeras, disimuladamente le pregunté:
-¿Cuánto llevas en la academia?
-Un año y ocho meses, sólo me quedan cuatro meses para acabar-me contestó el chico
Realmente no lo hacía nada mal, y me atreví a decirle que podía cortar más mi melena.
La profe revisó el cortado, el chico me secó el cabello al aire, seis euritos, y me fui hacia casa más feliz que una perdiz. Montse